Leyla: Hayat Ask Adalet

La protagonista de la serie de televisión turca “Leyla” es una joven que se ha visto obligada a soportar muchas dificultades desde la infancia. El primer shock que sufrió la pequeña Leila fue la muerte de su madre. Nadie está preparado para cosas tan terribles, especialmente los niños. Pero las dificultades para el bebé ni siquiera iban a terminar ahí. La vida decidió hacer todo lo posible para que ella creciera fuerte. Pero para ello tuvo que pasar por muchas dificultades que tuvo que afrontar sola. Y esto la ayudó a convertirse en quien es ahora. Como adulto.

Las dificultades después de la muerte de su madre continuaron creciendo en la vida de Leila. El padre de la niña entendió que él mismo no podría criar a la niña y, por lo tanto, decidió casarse por segunda vez. Sin embargo, su nueva esposa no fue nada amable con el niño. No le agradaba Leila y se lo hizo saber abiertamente. No mostró ninguna tolerancia hacia ella, solo crueldad una y otra vez. Y ella tampoco amaba al hombre mismo. Ella sólo quería su dinero. Y para conseguirlos, hizo todo lo posible para matarlo. La pequeña Leila perdió a toda su familia y quedó sola al cuidado de su malvada madrastra. Pero ella no quiso meterse con ella y arrojó a la pequeña al vertedero, como hacen con todas las cosas innecesarias. Después de esto, Leila sólo pudo encontrar fuerza dentro de sí misma y seguir sobreviviendo.

El personaje principal ha atravesado un camino difícil. Salió del montón de basura donde la había arrojado su madrastra y pudo llegar a la cocina de un restaurante de élite. Leila ha aprendido importantes lecciones sobre los sentimientos y ahora cree que el odio hacia ella es un sentimiento mucho más fuerte que el amor. Después de todo, fortalece a la persona. Y sólo las personas fuertes pueden avanzar más en esta vida. Pero cuando el destino la devuelva con su madrastra, le mostrará todo lo que ha aprendido durante estos años de supervivencia. Ella se vengará por todo lo que le hicieron a ella y a su familia. Después de todo, en el mundo de Leila tales acciones nunca se perdonan ni se olvidan.